Un cementerio olvidado

Hoy no vemos más que una placa, pero era conocido por todos durante la Revolución francesa. Se trata del cementerio Mousseaux, situado a una decena de metros de la barrera de Monceau y de la rotonda de Chartres. Cuando cerró el cementerio de la Madeleine durante la primavera de 1794, fueron sepultados aquí los guillotinados de la plaza de la Revolución (hoy plaza de la Concordia). El cementerio dio durante un tiempo descanso a huéspedes muy notables como Robespierre, Saint-Just, Desmoulins y Danton antes de ser trasladados (en el siglo XIX) al osario municipal de las catacumbas de París. En 1859, el cementerio fue desmantelado para construir el Boulevard de Courcelles.

Para saber más…

El reino del Terror y el gusto por lo macabro

Muchos lugares clave del reino del Terror (1793-1794), como el cementerio de Les Errancis, inspiraron obras literarias bastante peculiares. En esta época proliferó la literatura "gótica" y las novelas "negras", muy populares entre las familias de las víctimas y en toda Europa. Estas novelas narraban los horrores de la Revolución, como por ejemplo El Cementerio de Les Mousseaux, de 1801: ¡un relato protagonizado nada menos que por cabezas decapitadas cubiertas de sangre, cuerpos desmembrados y los lamentos de las víctimas y familiares!

París, la nueva Esparta: la Escuela de Marte

Campamento del Colegio de Marte en la llanura de los Sablons

La Escuela Militar fundada en tiempos de Luis XV estaba en desuso al inicio de la Revolución francesa. Los revolucionarios crearon en el mismo lugar la Escuela militar de Marte en la Plaine des Sablons, cerca de Neuilly. Se propusieron principios más democráticos: ya no se buscaba solo educar a la juventud de los nobles sino también a los hijos de los sans-culottes. Era cierto que se necesitaban oficiales, pero era más importante obtener buenos republicanos. Tras una solemne inauguración en 1794, cerró sus puertas unos pocos meses después.

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